Rememorando a Amelia Gabriela Boudet
Artículo redactado por Juan Miguel Fernández
En la Revista Espírita de 1865 Kardec había rendido homenaje a su esposa, a pesar de que nunca hablaba de su intimidad, diciendo: “Mi esposa… se adherió plenamente a mis intentos y me secundió siempre en mi laboriosa tarea, como lo hace todavía, a través de un trabajo frecuente por encima de sus fuerzas, sacrificando, sin pesar, los placeres y las distracciones del mundo, a las cuales su posición de familia acomodada habíala habituado”.
El Instituto Rivail, cuya enseñanza de primer grado se inicia con la física, química, anatomía, fisiología, se funda en 1825, contando desde 1826 con el apoyo magistral de la señorita Amelia Gabriela Boudet, pedagoga, profesora de primera clase de letras y bellas artes, de la Escuela de París, que ya había publicado “Cuentos primaverales” y “Nociones de dibujo”, quien posteriormente será su esposa.
En 1832 Hipolito León Devizart Rivail se casa con Amelia G. Boudet, nacida el 2 de noviembre de 1795 en Thiais (Sena), hija única de padres acaudalados, Juan Luis Boudet, propietario y antiguo escribano y Julia Luis Seigneat de Lacombe. Amelia era gentil, y graciosa, de fácil sonrisa y muy inteligente, de baja estatura, pero bien proporcionada, 9 años mayor que Rivail, aunque aparentaba 10 menos, a la que llamaba “Gabi”, que fue para él acicate, estímulo y la compañía excepcional en labores comunes.
Hasta 1834, en que se cierra por motivos económicos el Instituto, Amelia G. Boudet permanece al lado de Rivail, habiendo publicado “Lo esencial de Bellas Artes” en 1828, colaborando y ayudando en la marcha del Instituto, con su compenetración y comprensión.
Amelia, tras la desencarnación de Kardec, es contactada por el fotógrafo-médium Buguet, francés, que había trabajado en Francia e Inglaterra y se había hecho famoso por sus fotografías, donde hizo fortuna. Él realizó una serie de experiencias con la viuda de Kardec.
El 12 de mayo de 1874, apareció en la experiencia Allan Kardec con un mensaje en las manos “Gracias, mi querida esposa, gracias Leymarie (Responsable de la Revista Espírita), coraje Buguet”. Pero un señor de Montevil-Surmer pidió una fotografía de su hijo, muerto a los 10 años y medio, y apareció la fotografía de un hombre de 50 años. Los errores consecutivos provocaron que fuese sometido a juicio en 1874. Siendo condenado, Buguet declaró que realizaba un trabajo de sobreposición que resultaba fácil.
El 16 de junio de 1875 se inició un proceso judicial contra los espiritistas por el caso de las fotografías de los espíritus.
Amelia Gabriela Boudet tuvo que presentar testimonio como testigo de la causa, siendo tratada con todo desprecio sin que la honorabilidad de los años se tuviese en cuenta, y fuese respetada.
El Juez Millet, la interrogó y Kardec fue acusado de plagio.
¿De dónde sacó ese nombre? ¿En qué época?
Nosotros conocemos los orígenes de los libros: Él se valió de un libro de brugería de 1182. Su nombre es el de una “Gran Floresta” de Bretaña.
Nosotros no consideramos a las personas que copian de otros autores, ya que se burlan del espíritu público.
Amalia Gabriela Boudet contestó durante el juicio:
Todos los literatos usan pseudónimos, mi marido nada robó.
Fue un recopilador, no un literato, un hombre que hizo magia blanca o negra. ¡Quédese sentada! Contesto el juez Millet.
Amelia realizó un escrito posteriormente al Presidente de la “Séptima Cámara Correccional”, protestando, por su trato y el de su esposo.
Amelia falleció a las 5 de la mañana del 21 de enero de 1883, a los 89 años. Cuando Kardec murió tenía 74 y le sobrevivió 14 años. Su matrimonio duró 37 años compartiendo sus creencias y participando en su trabajo. Fue acompañada por un grupo de personalidades relacionadas con el matrimonio y con el Espiritismo. Siendo enterrada junto al dolmen de Allan Kardec en el cementerio “Peré Lachaise” de París.
Hablaron, espiritistas, poetas, escritores. La nota más destacada fue la del Sr. Lecoq Cochet, escritor y poeta, quién leyó una comunicación mediúmnica recibida el día anterior en la que el Espíritu de Antonio de Padua describía la brillante recepción que la hicieron en el espacio los amigos de la ilustre desaparecida, quienes la recibieron junto con Kardec. Una emoción intensísima embargo a todos.
Reconoció Leymarie la gran labor de la Sra. Boudet, con su estímulo y colaboración y recordó la importancia que había tenido con su insistencia y tesón, influyendo en Kardec para la publicación de “El Libro de los Espíritus” y la “Revista Espírita”.
A los pocos días de la muerte física de la Sra. de Kardec, el médium E. Cordurié, recibió expontáneamente una comunicación de ella, seguida de otra de su esposo, y con lo cual quedó demostrado una vez más la sobrevivencia del espíritu, y la reunión en el espacio de los seres que se han amado en la Tierra.
En 1890, producto del esfuerzo de la Sra. Boudet, Leymarie y otros colaboradores, salió a la luz pública “Obras Póstumas”.